Miradas

La infancia
a 20 kilómetros
de Chernóbil

Reportaje fotográfico de IÑAKI IZQUIERDO  |  Textos de YOLANDA VEIGA

Junio, 2017

Un fotógrafo de Sestao retrata la vida cotidiana en la frontera sur de Bielorrusia, una franja bajo el estigma de la radiación, para animar a familias españolas a que acojan a niños bielorrusos en verano

La primera vez que Masha salió de su aldea, en Brahin, fue estas navidades. Cuatro horas en autobús hasta la ciudad de Minsk para sacarse el pasaporte y poder viajar a Alicante a despedir el año junto a una familia española. Dos semanas y de regreso a Bielorrusia, su casa… el país olvidado de Chernóbil. El 26 de abril se cumplieron 31 años del accidente en la central nuclear ucraniana, a apenas 15 kilómetros al sur de la frontera Bielorrusia. El fotógrafo documentalista Iñaki Izquierdo (Sestao, 51 años) lleva cuatro inviernos viajando a esta franja deprimida que se hiela a veinte bajo cero en enero y vive bajo el estigma de la radiación. Iñaki retrata escenas cotidianas de precariedad económica… muchas veces también emocional. Estampas de hogares que en ocasiones no lo son, la vida que se hace en una habitación porque solo hay leña para calentar esa estancia, la infancia coartada a unos niños que dejan de serlo demasiado pronto. Cientos de estos chiquillos buscan una familia de acogida con las que pasar dos meses de verano en España. E Iñaki, con su cámara, intermedia y echa una mano a las asociaciones vascas Acobi y Bikarte, que gestionan los programas de acogida en Euskadi.

El 26 de abril de 1986, sábado, se produjo un accidente en la central nuclear Vladímir Ilich Lenin, en Chernóbil, al norte de Ucrania. Murieron 31 personas y hubo que evacuar a 116.000. El desastre medioambiental traspasó las fronteras ucranianas y se detectó radiactividad en trece países cercanos.

Mapa de Ucrania y Bielorrusia
Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«A Masha, que tiene 14 años, le pagué el autobús a Minsk y lloraba cuando se estaba haciendo el pasaporte. ¡Tenía tanta ilusión por salir de Brahin! Nunca había estado en la ciudad, toda la vida en su pequeña aldea, que está próxima a la frontera con Ucrania y la central de Chernóbil. Es una adolescente bondadosa que te enamora»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«Aliaksandra vive con su madre, que padece un problema de obesidad, en un bloque de dos plantas de arquitectura soviética. Es un piso en mitad del campo, en una zona rural al lado de Brahin, a 40 kilómetros de Chernóbil. Gracias a la asociación Acobi este año va a venir a pasar este verano a Ontón (Castro)»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«Zina tiene 86 años y vive con su hijo Anatoli, de 62, a menos de 20 kilómetros de la central nuclear. En medio de ese aspecto de soledad, tienen una casa muy cuidada, aunque no hay agua corriente y tienen que ir a la fuente de la calle. Anatoli no tiene hijos pero mantiene un parque infantil para que jueguen los niños de la aldea»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«Esta humilde familia posa en una sala desangelada porque el televisor lo tienen en la habitación, que es donde hace más calor. La madre fue una víctima de Chernóbil y cuando evacuaron las aldeas próximas la enviaron con una familia de acogida un tiempo en Italia. Se nota un trato cariñoso hacia sus hijos (Cristina, Karina y Angelina) y volví otro día a su casa, a tomar un café y estar con las niñas mientras hacían los deberes»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«El pequeño Tima sujeta un retrato de sus abuelos. Su casa está llena de fotos, y fuera la familia tiene una huerta pese a que la tierra está contaminada por la proximidad a Chernóbil. A la izquierda se ve el fuego, que se hace dentro de la propia pared. Las chimeneas están incrustadas y mantienen caliente una habitación de la casa. Fuera habría ese día 8 o 10 grados bajo cero»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«Ania cumplió años el 3 de marzo… 13. Es la mayor de tres hermanos y se encarga de hacer la comida en casa. Vive en una pequeña aldea pero va a pasar este verano con una familia de Guriezo (Cantabria). Cuando me conoció me pidió que le hiciera su amigo en Facebook. Lo puede mirar a veces en la escuela porque ella no tiene móvil. Algunos niños de su edad sí»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«Yannis es hermano de Ania y, como muchos niños, pasa el oscuro y largo invierno viendo la televisión. A veces ponen dibujos pero muchas otras hay películas de malos malísimos que destilan estereotipos machistas. También hay una serie sobre turcos en las que se les presenta super blancos, como si fuera ‘Falcon Crest’. Yannis vendrá este verano a Huelva»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«A Maya la sorprendí pensando delante del espejo. Es la hermana de Ania y ese día era fin de semana, así que no había colegio. La escuela está a unos dos kilómetros y aunque a veces van andando tienen suerte de que pasa cerca un autobús»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«La casa donde duerme este bebé está en Timonovo, un pueblo construido para realojar a la gente de las zonas más afectadas por el desastre de Chernóbil. Este niño tiene cinco hermanos y dos de ellos han venido algún verano a Euskadi. Las familias se prestan a la foto porque quieren que sus hijos salgan de allí, que disfruten y sean felices»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«La mayoría de estos niños del orfanato de Novogrudok están allí porque las autoridades han retirado la tutela a sus padres por alcoholismo. Cuando llegué andaban locos detrás de mí, les das un poco de cariño y se agarran a eso. Están bien cuidados y si a los 18 quieren estudiar el Estado les paga un piso, pero tienen carencia de afecto»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«Los abuelos, la hija y los nietos posan en esta casa que es realmente una sola habitación donde comen y duermen, aunque la comida se prepara en otra estancia fuera. La madre había estado de niña en Euskadi con el programa de acogida pero ya se le ha olvidado todo el castellano que aprendió»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«Elena ha salido a Inglaterra este verano. Su familia vive en una casa en la carretera, entre Timonovo y una zona de campo. La casa está sola y alejada así que ella y sus dos hermanos tienen pocos amigos. El colegio lo tienen a dos kilómetros y recorren esa distancia a pie cada día porque no hay autobús en esa zona»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«Me gusta que los niños estén serios porque fijan la mirada. Cuando no voy a estar mucho tiempo con ellos prefiero establecer esa distancia, no mostrarme muy cercano. Ekaterina me ofrece una mirada retadora. Vive con su madre y sus cuatro hermanos»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«Nikita vive con su madre en una residencia de estudiantes. Le falta una mano pero no para de saltar y dar volteretas, demostrando que él puede hacer cosas. Ha venido algún verano a Murcia y un señor gallego que supo de su historia se ofreció a pagar el billete para que viniera con su madre a vivir a España. Pero ese no es el objetivo. El cariño entre madre e hijo es muy potente»

Chernóbil en 2017: fotos de la vida de familias a 20km de la central nuclear, en la actualidad

«Es sábado por la tarde, un sábado de invierno frío, aunque alguno de los chicos esté en manga corta. Los chavales de Timonovo han puesto una barra en el árbol y así pasan el rato. Andan juntos chicos mayores de 18 años con niños de 12»